Recuerdos en un frasco

Hay momentos de la vida que me encantaría poder almacenar en un frasco, existen las fotos, los vídeos, y si; la memoria para recordar cada uno de esos instantes, aunque no será igual. Son momentos que duran un segundo, algunos unas horas, o incluso toda una noche. Esos instantes en los que te encanta estar donde estás y te sientes realmente genial. Soy bastante exigente, muchas veces aún estando bien, miro hacia los lados buscando ese vacío que falta en el hueco que siento.
Aunque cuando se alinean los planetas no siento esa necesidad de buscar, miro y me digo; con esto no me hace falta más.

Compartir estos dos días con personas geniales, crear nuevos instantes de esos que hay que almacenar. Risas, bromas tontas y mucha imaginación. Me ha gustado sentirme tan "querida", para que lo voy a negar, aunque me ausente por momentos y me aleje del resto del mundo en ocasiones, me gusta encontrarme con una mano que tire de mi y me devuelva de nuevo a ese mundo. Que me hagan cómplice, y que se involucren en mis preocupaciones. Me ha gustado no tener que pensar tanto, y disfrutar del momento. 

Conversaciones nocturnas hasta altas horas de la noche, abriendome a esas nuevas personas especiales que aparecen en mi vida. Que me escuchan y me entienden, que no me juzgan por lo que digo.

Que me encanta compartir la adrenalina y la euforia de las atracciones fuertes. Sentirse tan libre, tan pleno.

Y aunque me encuentre con personas que desearía no haber vuelto a ver nunca más en mi vida, aprenda la lección, y me ayude a darme cuenta y a recordar todo eso que ya viví y por lo que no quiero volver a pasar.